Es
la primera vez que hago esta tarta…y creo que igual es hasta la primera vez que
la como…
Es
una petición especial, mi amiga no dejaba de decirme lo mucho que le gustaba
esta tarta, así que aprovechando que iba a su casa se la he hecho y será
perfecta para acompañar el café…
Tarta
Sara
Para
el bizcocho: molde de 15 cm.
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3 yemas
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3 claras
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1 huevo entero
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130 gr de azúcar
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80 gr de harina
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20 gr de maicena
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30 gr de almendra molida en polvo
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ralladura de 1 limón
Para
el almíbar:
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100 gr de azúcar
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100 ml de agua
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Unas gotas de limón
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Licor amaretto
Para
la crema de mantequilla:
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300 gr de mantequilla sin sal pomada
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85 ml de leche
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150 gr de azúcar glass
Para
el relleno y la decoración:
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Mermelada de albaricoque
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100 gr de almendras laminadas
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Azúcar glass
Batimos
bien las claras, incorporamos poco a poco los 80 gr de azúcar. Reservamos.
Batimos
las yemas y el huevo con 50 gr de azúcar y la ralladura de limón, hasta
conseguir una mezcla blanquecina y que triplique su volumen.
En
un bol grande, mezclamos con movimientos envolventes las claras con las yemas y
vamos incorporando la harina y la almendra molida tamizadas.
Echamos
en el molde, previamente engrasado, y horneamos a 180º arriba y abajo sin aire
durante 25 / 30 minutos (nos aseguramos pinchando el bizcocho y viendo que el
pincho sale limpio). Dejamos enfriar unos minutos, desmoldamos y enfriamos del
todo sobre una rejilla.
En
un cazo ponemos a hervir el agua, el glass y el limón. Llevamos a ebullición
durante 10 minutos. Apagamos el fuego y añadimos el licor. Reservamos.
Para
la crema de mantequilla batimos la mantequilla con el azúcar a velocidad máxima
durante 5 minutos o hasta que doble su volumen, se aclare y tenga una textura
que recuerde a un helado. Le añadimos la leche si fuese necesario.
Partimos
el bizcocho por la mitad y lo empapamos con el almíbar.
Extendemos
una capa de mermelada de albaricoque y sobre esta una capa de crema de
mantequilla.
Ahora
cubrimos toda la tarta con la crema de mantequilla restante.
Colocamos
un buen trozo de papel debajo de la tarta y vamos echando las almendras sobre
esta, cubriéndola entera, incluso los laterales. Las almendras que vayan cayendo
sobre el papel las recogemos y las volvemos a colocar, hasta que la tarta esté
completamente cubierta.
Las
almendras laminadas se han de tostar antes. Las ponemos bien extendidas en una
sartén grande y plana y sin aceite y vamos dorándolas poco a poco, con cuidado
de que no se quemen, pues amargarían. Las vamos tostando y las dejamos enfriar
sobre un papel de horno.
Decoramos
con un poco de crema de mantequilla y alguna guinda y lista!
Hasta
pronto!!!
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